Hace un par de días pasé por un comercio callejero y me compré un par de medias de lana, al pagarle al vendedor y verlo visiblemente afectado por el frío le dije el clásico "Está bravo el frío ¿eh?" y su respuesta fue: "'Ta bravo, pero gracias a eso es que vendemos!" y ahí me hizo surgir una sonrisa y decirle "Tenés razón".
Hoy, ya habiendo olvidado esta charla, acabo de adquirir una recarga de super gas para la cocina de mi casa, el muchacho me dejó la garrafa de 13 kilos, le pagué, y al abrir la puerta para despedirlo el frío me hizo estremecerme, nuevamente en forma automática le tiré: "Está bravo el frío ¿eh?" y su respuesta fue más llamativa aún: "deja quieto, que siga así noma'!!" y se fue a seguir repartiendo con 2 o 3 grados centigrados.
Estas 2 situaciones en poco más de 48 horas, me generaron el deseo de compartirlo con ustedes y hacerles ver que siempre hay 2 lados de la moneda. Lo que para mi era algo absolutamente negativo e inútil (este tremendo frío), para otros es en realidad la posibilidad de hacer una diferencia económica que lo termina ayudando a vivir mejor.
Viviendo y aprendiendo.
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